
El metro de Járkov, inaugurado en 1975, consta de tres líneas y 30 estaciones que abarcan 39 kilómetros y conectan varias partes de la extensa ciudad. En ciudades extensas como lo es ésta, el transporte público es una alternativa necesaria al vehículo privado, proporcionando acceso equitativo y asequible a las oportunidades educativas, económicas y sociales para todos los residentes. En las ciudades densamente pobladas, no sólo facilita la movilidad diaria aliviando la presión sobre las calles y la congestión, sino que también contribuye a la mejora de la calidad del aire. En un futuro, el transporte público podría reducir las emisiones de gases de efecto invernadero hasta un 45%, contribuyendo a la mitigación del cambio climático.


sufre niveles de saturación que afectan a la comodidad
y la puntualidad del servicio
Por otra parte, en muchas áreas suburbanas y periféricas, el 30% de la población no tiene un acceso adecuado a los sistemas de transporte, lo que limita la movilidad y el acceso a los servicios y oportunidades laborales. A medida que las ciudades crecen, es necesario invertir en sistemas de transporte público accesibles y eficientes y que, a su vez, sean sostenibles y respetuosos con el medio ambiente.


El metro de Nueva York es el mayor sistema de transporte subterráneo de Estados Unidos y uno de los más antiguos del mundo. Se compone de 29 líneas y 468 estaciones que cubren toda la ciudad y cercanías. Es el medio de transporte más utilizado por los residentes para desplazarse por la ciudad.
“ En Nueva York, más del 60% de los residentes utilizan
el transporte público a diario, en comparación con
menos del 10% en ciudades menos densas
— Organitzación Internacional del Trabajo


